Aquí os dejamos unos truquillos de la abuela, para que el día a día en las tareas del hogar os resulte un poco más fácil y llevadero. Espero que os sean de gran utilidad.
Mamparas de cristal con cal.
Ha llegado la hora de hacer el baño y cada vez que tenemos que limpiarlo es una lucha diario y constante con nuestra gran enemiga la “cal”. Siempre pegada y repegada en nuestra mampara. Cuando te dispongas a limpiarla, llena un cubo con agua templada y añade un buen chorreón de vinagre de vino. Si la cal está muy incrustada añade un poco de vinagre a la bayeta, también puedes rociar la mampara con el vinagre y frotar un poco con la bayeta. Te aseguro que te resultará mucho fácil y es un truco que siempre funciona, quedarán como nuevas y además te duraran mucho más tiempo limpias.
Ropa de color perfecta.
¿A quién no le ha ocurrido alguna vez en su vida que a la hora de sacar la ropa de la lavadora alguna prenda nos ha desteñido y nos ha jorobado nuestra camiseta favorita?. Con este truco eso nunca te pasará.
Cuando pongas una lavadora de ropa de color, añade siempre al tambor un poco de vinagre de vino, eso ayudará a fijar los colores. Haz el lavado como siempre, utilizando el mismo programa, misma cantidad de detergente y suavizante que normalmente sueles usar cunado lavas. La única diferencia es que en el monto que pongas el detergente, tal solo tienes que añadir como un dedo de vinagre. El vinagre te ayuda a fijar los colores y que estos no naden libremente por tu lavadora. También si lavas a mano puedes poner un poco a la prenda que lavas y los colores de tu ropa serán más duraderos y más vivos durante más tiempo.
¡¡Ojo!! Tus prendas no olerán a vinagre, no te preocupes.
Piojos en casa.
Cuando empieza la temporada del cole, es posible que nos lleguen algunos invitados bastantes picajosos. Si alguna vez te ocurre que de pronto de das cuenta que tus hijos o tú o algún miembro de la familia a cogido piojos y es demasiado tarde para comprar un producto específico para eliminarlos, tranquila no sufras, tienes una gran amigo en tu cocina que te ayudará a eliminar a estos invitados tan molestos. “El vinagre”.
Lava la cabeza como siempre y una vez que tengas el pelo limpio y sin jabón enjuaga tu cabeza con vinagre y escúrrela. Cuando la tengas escurrida envuelve la cabeza con papel de aluminio y dejarla como un par de horas. Transcurrido ese tiempo lávala otra vez con jabón y sécala como normalmente haces. Esto solo mata a los piojos (a los bichos), las liendres (los huevos) es posible que puedan quedar algunos, para ello te aconsejamos que te planches el pelo (con una plancha de pelo). Una vez que tengas el pelo limpio y seco, revisa tu cabeza y la de los tuyos.
